HUMANS - NUEVA COLECCIÓN TRUE
Solo las nuevas generaciones entienden que lo humano nos conecta más allá de nuestra etnia, nacionalidad o género. Somos ciudadanos del mundo y sentimos que nuestra inspiración, estética y pasiones superan las líneas fronterizas, viajamos a un lugar distante y allí nos encontramos en la diferencia y nos sorprendemos de lo mucho que nos parecemos todos en el fondo. Esa idea se siente en nuestra nueva colección.
Con HUMANS queremos contar una historia global: tomamos algo tradicional como las ilustraciones ancestrales chinas y las pintamos de futuro al estilo TRUE con una paleta neón. La inspiración en el “Lejano Oriente” revela lo fácil que es conectarnos con algo más allá de nuestro límite geográfico. Y para darle nivel, colaboramos con una artista de la ciudad por primera vez.
La ilustradora Colombiana Carolina Peláez (@kropsiland) le puso todo el feeling a esta inspiración y por eso más que nunca los estampados son de alto impacto. La verdad, el resultado es increíble: Dragones, serpientes y grullas son protagonistas en el frente de camisetas y buzos, mientras unas llamas ondulan trepando algunas prendas.
¿En color? Tenemos un pantalón en rosado encendido en la silueta favorita de nuestra gente, sudaderas y chaquetas en bloques de color con estampdos y acentos reflectivos, camisetas y tops con toques de verde y naranja sobre blanco, negro y gris, para que sea fácil ponerle un poquito de neón a cualquier pinta. Y para las siluetas, esta vez nos lanzamos a algo con más actitud masculina, después de THE SUNCITY que tenía inspiración femenina.
NY: capital del mundo
Una historia global solo se puede contar desde la ciudad donde nos fusionamos todos: New York City. Trabajamos con modelos/no modelos, gente exótica, mezclas de todo un poco y de orígenes muy distintos. HUMANS somos todos, no importa la piel, los tattoos, los cortes, los estilos. Tomando las fotos de campaña vimos las calles de NY como la gran ciudad del mundo, con esa actitud urbana que tanto inspira a TRUE, cruzando gente viviendo en otros idiomas, encontrando todo tipo de comidas, bares y escenas… y solo se nos ocurrió decir: “We belong to the world”.
